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IOWA
La influenza: Guía para padres
¿Qué es la influenza?
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La influenza (también conocida como gripe) es una enfermedad
respiratoria contagiosa causada por los virus de la influenza, que infectan la nariz, la garganta y los pulmones. La influenza es diferente a un resfriado y generalmente se presenta de manera repentina. Cada año, los virus de la influenza hacen que millones de personas se enfermen y cientos de miles sean hospitalizadas, y causan miles — o decenas de miles — de muertes en los Estados Unidos.
La influenza puede ser muy peligrosa para los niños. Los CDC estiman que cada año la influenza causa la hospitalización de entre 6000 y 26 000 niños menores de 5 años por la influenza cada año en los Estados Unidos. La vacuna contra la influenza es segura y ayuda a
proteger a los niños contra la enfermedad.
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Lo que deben saber los padres
¿Qué tan grave es la influenza?
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Aunque la enfermedad de la influenza puede variar entre leve y grave, es frecuente que los niños necesiten atención médica. Los niños menores de 5 años y los de cualquier edad c on ciertos problemas de salud de largo plazo tienen alto riesgo de presentar complicaciones por la influenza como neumonía, bronquitis e infecciones de oído o sinusitis.
Algunos de los problemas de salud que se sabe que hacen que los niños sean más vulnerables a la influenza incluyen el asma, la diabetes y los trastornos del cerebro o del sistema nervioso.
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¿Cómo se propaga la influenza?
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Se cree que los virus de la influenza se propagan principalmente a través de las gotitas que se forman cuando una persona con la enfermedad tose, estornuda o habla. Estas gotitas pueden llegar a la boca o la nariz de las personas que estén cerca. Una persona también puede contraer la influenza al tocar algo que tenga el virus y luego
tocarse los ojos, la nariz o la boca.
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¿Cuáles son los síntomas de la
influenza?
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Los síntomas de la influenza pueden incluir
fiebre, tos, dolor de garganta, moqueo o
congestión nasal, dolores en el cuerpo, dolor
de cabeza, escalofríos, cansancio y, en algunos
casos, vómitos y diarrea (más frecuentes en los
niños que en los adultos). Algunas personas con
influenza no presentan fiebre.