Hay mucha discusión e información incorrecta acerca de que la vacuna contra el COVID-19 provoca miocarditis (inflamación en el corazón) en adolescentes. Este es un tema muy importante de entender ya que solo el 42% de adolescentes entre 12 – 19 años han recibido por lo menos una dosis en el Condado de Polk. Y los adolescentes que aún no se han vacunado y los padres necesitan tener información que es precisa, de una fuente creÃble y basada en la ciencia.
Casos de miocarditis notificados al Sistema de Notificación de Reacciones Adversas a las Vacunas (VAERS) que ocurrieron:
Después de la administración de vacunas de ARNm contra el COVID-19 (Pfizer o Moderna), especialmente entre adolescentes y adultos jóvenes de sexo masculino.
Con mayor frecuencia luego de la segunda dosis.
Generalmente en los dÃas posteriores a la vacunación.
La mayorÃa de los pacientes con miocarditis o pericarditis que recibieron atención respondieron bien al tratamiento con medicamentos y al reposo y mejoraron rápidamente.
o Tanto la miocarditis como la pericarditis tienen los siguientes sÃntomas: dolor de pecho, dificultad para respirar, sensación de que se le acelera el corazón, o le late con más fuerza.
o Busque atención médica si usted o su hijo tienen algunos de estos sÃntomas, especialmente si se presentan en el lapso de la semana que se vacunaron contra el COVID-19.
¿Igual debo vacunarme o vacunar a mi hijo?
SÃ. Los CDC siguen recomendando que todas las personas de 12 años de edad o más se vacunen contra el COVID-19. Los riesgos conocidos del COVID-19 y las posibles complicaciones graves relacionadas con la enfermedad, como problemas de salud a largo plazo, hospitalizaciones e incluso la muerte, superan los riesgos potenciales de tener alguna reacción adversa poco común posterior a la vacunación, como el posible riesgo de tener miocarditis o pericarditis.
Sobre todo, es importante saber que varios estudios han encontrado riesgo de miocarditis en aquellos individuos que han tenido la enfermedad del COVID-19. Aquellos que no se han vacunado tienen un riesgo más alto de inflamación en el corazón, que aquellos que están completamente vacunados.
Si usted o su hijo ya recibieron la primera dosis de las vacunas de Pfizer o de Moderna, es importante que reciban la segunda dosis excepto que su médico le indica que no se la aplique.